Quien sea capaz de tomarse
a sí mismo con ironía y relatividad, además de haber encontrado una de las
terapias más recomendables contra muchos males físicos y psíquicos, dará un
paso decisivo para descubrir en los demás a sus iguales.
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Ajustar la perspectiva de la
propia tarea a la realidad, ayuda a evitar muchos sufrimientos y sinsabores. Esto
no quiere decir que haya que enfriar la pasión en la labor, todo lo contrario,
porque para poder avanzar, para no ser derrotados por el desánimo, es necesario
estar enamorado de lo que se intenta hacer, es necesario tener la sensación de
que no se puede uno alejar por mucho tiempo de aquello donde encuentra la felicidad.
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Sustituyamos ensimismamiento por
‘entimismamiento’, incluso cuando se
hable de uno mismo debería perdurar éste sobre aquél.
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Sólo estoy convencido de una
cosa: la actitud del discípulo es la más sabia, porque sólo el aprendizaje
continuo procura la mejoría.
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Uno de los mayores daños que los
políticos infligen a la sociedad es la corrupción del lenguaje, el escarnio que
hacen de nuestro tesoro, la impunidad con la que lo maltratan, intentándolo
convertir en aliado de sus mentiras.
